

En ESEDIN, nos dedicamos a fomentar el desarrollo integral y sostenible de niños y jóvenes. Ofrecemos herramientas que les permiten funcionar adecuadamente, lo que contribuye a mejorar su rendimiento en el entorno familiar y su integración social. Estamos convencidos del potencial que cada uno tiene y nos esforzamos para que puedan destacar en su camino hacia un futuro brillante.
Un individuo con trastorno del espectro autista puede tener problemas con la interacción social y las habilidades de comunicación, incluso presentar cualquiera de los siguientes signos:
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No responde a su nombre o, en ocasiones, parece no escucharte
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Prefiere jugar solo y se abstrae en su propio mundo
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No suele hacer contacto visual y carece de expresión facial
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No habla o tiene un desarrollo tardío del habla, o bien pierde la capacidad que tenía para decir palabras u oraciones
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No puede mantener ni iniciar una conversación
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Habla con tono o ritmo anormal
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Repite palabras o frases textuales, pero no comprende cómo usarlas
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Interacciones sociales de forma inadecuada comportándose de manera pasiva, agresiva
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Tiene dificultad para reconocer señales no verbales, como la interpretación de las expresiones faciales de otras personas, las posturas corporales o el tono de voz
Patrones de comportamiento
Un niño o un adulto con trastorno del espectro autista puede tener intereses, actividades o patrones de comportamiento repetitivos y limitados, e incluso presentar cualquiera de los siguientes signos:
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Realiza movimientos repetitivos, como balancearse, girar o aletear con las manos
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Realiza actividades que podrían causarle daño, como morderse o golpearse la cabeza
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Desarrolla rutinas o rituales específicos y se altera con el mínimo cambio
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Tiene problemas con la coordinación o muestra patrones de movimientos extraños, como caminar en puntas de pie, y muestra un lenguaje corporal extraño, rígido o exagerado
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Se deslumbra con los detalles de un objeto, como las ruedas que giran en un auto de juguete
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Es más sensible que lo habitual a la luz, el sonido o el contacto físico, pero puede ser indiferente al dolor o la temperatura
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Se obsesiona con un objeto o una actividad
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Tiene preferencias específicas con respecto a los alimentos, como comer solamente unos pocos alimentos o no comer alimentos con una determinada textura
A medida que avanzan, muestran menos alteraciones del comportamiento. Algunos, generalmente los que tienen problemas menos graves, con el tiempo pueden llevar una vida normal o casi normal.